Hubo un tiempo en el que me reía de iOS. Hubo un tiempo en el que confiaba en la popularización del escritorio de Linux, en alguno de las decenas posibles. Hubo un tiempo en el que creí que ChromeOS ampliado iba a triunfar (y aún puede ser). Todas esas opciones son parciales y siempre dependen del contexto: para un momento dado de la tecnología, distintas opciones dan respuesta a las demandas de los usuarios
Sigo pensando que ChromeOS ampliado es la respuesta a las necesidades de muchos usuarios. Atención a la lista:
- ChromeOS. Chrome completo, con sus servicios y aplicaciones, el más alto nivel de securización comercial y out-of-the-box posible. Perfectamente válido para el día a día, especialmente (pero no sólo) si usas Google Apps.
- Android. Integrado en los Chromebooks modernos, ofrece una enorme biblioteca de apps con servicios online y offline de todo tipo. Sobre el kérnel linux de ChromeOS
- Escritorio linux con Crostini. Sobre el kérnel linux de ChromeOS
La combinación es brutal, como veis. Un único kérnel y, sobre él, inicialmente un entorno securizado para trabajo web. Yo lo uso a diario y aún con máquinas de 2014, es perfecto
Es una maquinita humilde, con una CPU ligera aún para 2014. Pero hace su cometido. En otra entrada la revisaré 5 años después. Es perfectamente válida para ChromeOS, pero no tiene ni Android ni Crostini.
He probado un ChromeBook moderno: el pixelbook de @tejedor1967, posiblemente el portátil más bonito y mejor acabado que se puede comprar hoy. He comprobado la funcionalidad de ChromeOS + Android + Linux y es tremenda. Tiene fallos, como no haber adaptado aún tras 7 años los puñeteros drivers de audio para linux. Pero vamos, utilísima para una enorme mayoría de usuarios
Pero creo que se puede hacer mejor en 2019. Absolutamente mejor
Podemos partir de una máquina windows decente. Digamos, al menos 12gb de RAM y mejor 16. Es mucho más de lo que necesita ChromeOS, pero 16Gb de RAM en 2019 no debería ser un problema.
Windows es, al final, el camión de Steve Jobs. Y la excavadora. Y el tanque. Y el martillo neumático. Y el torno. Y el pantógrafo. Y cualquier herramienta para trabajo en PC local, con alguna excepción absurda e injustificable (por parte del vendor) como pueda ser el DevonThink de @rfog. Salvo anecdóticas excepciones, todo está en win32. Al revés (en MacOS o cualquier escritorio *nix) no se puede decir lo mismo. Todos ellos tienen que emular en un momento o en otro alguna aplicación win32 que necesitan.
Si las aplicaciones se instalan legalmente y de fuentes confiables, nadie debería tener nada que temer. El malware procedente de ejecutable es algo ya vintage, que produce nostalgia… o repelús, si es resultado de algun bípedo obsoleto que insiste en bajarse piratón alguna pieza de software desde ese sitio ruso con fotos de mozas estupendas.
De momento, hablamos de win32. Eso sigue disponible a gran escala. Es EL PC, con variantes aparentemente infinitas de tamaño y de forma para cualquier bolsillo y necesidad. Pero es ampliable a un contexto de 2019
En primer lugar tenemos las apps móviles. Aquellas a las que estamos acostumbrados tras más de 12 años de smartphones, y que no todas tienen sustituto web. Por ejemplo, maps.google.com es el equivalente a google maps. Pero no hay sustituto offline a Instapaper (por culpa de los de instapaper, vale, pero es lo que hay). Jueguecicos. Lo que sea que uséis en Android.
Todo eso ya no va a venir a windows. Las n iteraciones de apps móviles para windows se dieron de bruces contra el principio de realidad, y sus escollos de los cambios injustificables de APIs y de ir a su bola con el timing mientras el mercado móvil avanzaba a la velocidad del rayo. Eso no va a cambiar.
Lo que es perfectamente posible es adoptar Android dentro de windows. Ya hay empresas que ofrecen máquinas virtuales de Android para windows, y funcionan. Si lo hiciera Microsoft, optimizando la máquina virtual con sus ingenieros y su control del kérnel NT, el rendimiento sería perfecto. Indistinguible del que se obtiene en un tablet android y a la par que el que se obtiene en un chromebook compatible con android. Con esto, sumaríamos la enorme biblioteca Android a la biblioteca windows, y posiblemente se ejecutaría en un entorno aislado. Las máquinas windows podrían llegar al siglo XXI y servir las apps móviles que el usuario final o corporativo necesitan.
Luego tenemos Windows Subsystem Linux. Yo lo uso a diario y ha sustituido a los entornos anteriores que tenía para BBDD y python. Levantar mysql y sus servicios asociados es trivial en linux con unos cuantos $apt-get install
y configurando unos pocos archivos. Hacer lo mismo en windows no es sencillo. Parece que recientemente la cosa ha cambiado gracias a chocolatey, y que se puede instalar casi con la misma sencillez mysql en un entorno windows. Yo ya estoy acostumbrado a hacer esas cosas con Linux, y se hace transparente gracias a WSL. La versión 2 de WSL va a ser aún más cañera, pero a mí me vale perfectamente con la actual. Con ella manejo un terminal con Bash, python en la versión que necesito y sus bibliotecas, y todo funciona bien y siempre. Es un salto bestial que reduce muchísimo el beneficio de un escritorio linux alternativo para entornos de trabajo, sobre todo porque lo que se trabaje en local se puede subir a un servidor linux sin cambios. En resumen, es un salto de productividad tremendo para un segmento pequeño pero no anecdótico de usuarios.
Aún – creo – se puede hacer mejor. La ventaja final de ChromeOS es su securización. Sigue siendo la opción más segura del mercado con enorme diferencia. La maquinita que os he puesto líneas arriba es la que uso, entre otras cosas, para transacciones económicas de entidad, porque es la que más seguridad me va a proporcionar y sin invertir más tiempo y dinero en ello. De hecho, llevo años recomendando los Chromebooks como máquinas para las personas mayores que necesiten un navegador. Eso o un iPad son productos que van a satisfacer las necesidades del jubilado no muy ducho en informática, mientras que el pariente más joven se puede olvidar de tener que dar asistencia técnica casi constante. Funciona, es seguro, y vuestro padre, tío o abuelo puede hacer hasta compras por internet sin peligro.
Pues bien, resulta que Edge ha cambiado su motor por el de Chrome. Dejando aparte que, de repente, se ha hecho compatible con la enorme biblioteca de extensiones de Chrome, existe la enorme oportunidad de securizarlo. No a nivel de ChromeOS, a menos que se pudiera lanzar una sesión de windows “kiosquizada”, con Edge y nada más… lo que no acaba de tener sentido; para eso, te compras un chromebook. Lo que es perfectamente factible es securizar Edge aislándolo del resto del escritorio, sandboxizando el navegador con la radicalidad con la que lo hace Qubes OS con sus componentes. Es algo perfectamente al alcance de Microsoft, y ofrecería el nivel de seguridad de ChromeOS.
En resumen: la experiencia de usuario ampliada de windows de 2019 ofrecería:
- Win32 y su enorme biblioteca. Muchísimos dependemos de ella
- Android y su biblioteca, la mayor de apps móviles instalable en un PC.
- Un entorno CLI Linux completo y funcional
- Un navegador compatible con chrome y securizado a nivel de ChromeOS
En 2019 no se me ocurre un entorno más completo y funcional.
¿Qué os parece?