Conversación distribuida en Jornadas sobre inmigración

Ayer, día 17 de octubre, se desarrolló con éxito una Jornada de reflexión sobre inmigración y crisis en Getafe. La organización y diseño de la Jornada recayó sobre nuestra empresa y, pensando en los objetivos que nos marcó el Ayuntamiento de Getafe y en el perfil de los asistentes, diseñamos el siguiente programa: en primer lugar, dos ponencias nos aportarían el marco en el que tendría que desarrollarse la reflexión; y, en una segunda parte, se realizaría una dinámica que permitiera la máxima participación de los asistentes: workshops de conversación distribuida. ¿El objetivo? Lograr resultados operativos, una reflexión conjunta que lleve a conclusiones concretas.

El Ayuntamiento de Getafe quería que esta Jornada contribuyera a la adaptación óptima de los servicios sociales del Ayuntamiento a las necesidades reales de la población inmigrante en Getafe, así como lograr mantener el nivel de participación que desde hace años caracteriza al tejido asociativo inmigrante en ese municipio. La situación de crisis es el marco general en que se desarrolla esta reflexión y la que exige una adaptación y una apuesta conjunta de técnicos y asociaciones.

Sobre esta base, buscamos dos expertos que nos hablaran, por un lado, de cómo está afectando la crisis a la población inmigrante en España; y, por otro, de una posible respuesta a la crisis desde el asociacionismo inmigrante. La primera conferencia, Crisis económica e inmigración, corrió a cargo de Walter Actis, del Colectivo IOÉ, que hizo un repaso desde los datos oficiales al efecto de la crisis en el colectivo inmigrante. Entre otras conclusiones, pudimos comprobar cómo la crisis no está afectando por igual a todos los inmigrantes, con variaciones según lugar de procedencia, edad, especialización o género, entre otras. La segunda conferencia la impartió Jean de Dieu Madangi, presidente de la Asociación Intercultural Bwato, quien hizo una profunda reflexión sobre el papel potencial del asociacionismo como respuesta a la crisis y apuntó críticas y sugerencias, tanto a las asociaciones inmigrantes actuales como a las administraciones locales, de cara a mejorar la situación de la población inmigrante. En particular, habló de promover la creación de plataformas que permitieran el trabajo en red entre asociaciones y de abandonar el modelo atomizado y anárquico que caracteriza a buena parte del tejido asociativo inmigrante actual.

Tras un descanso, con un café a cargo de la red Katerin Kas, comenzaron los talleres de conversación distribuida.

Estos talleres o workshops de conversación distribuida consisten en distribuir a los asistentes en pequeños grupos que reflexionan en torno a unos temas propuestos. Cada grupo elige de entre sus miembros a un portavoz, que será quien se encargue de la puesta en común de las aportaciones de su grupo. El grupo reflexiona durante un tiempo limitado y procura sintetizar las aportaciones principales de sus miembros para su posterior puesta en común. Las conclusiones finales se construyen, por tanto, sobre las aportaciones de todos los grupos, con lo que se logra una participación masiva en las conclusiones de unas Jornadas.

Esquema de workshop de conversación distribuida

En las Jornadas que nos ocupan, los asistentes se distribuyeron en grupos de entre 8 y 10 personas, procurando que en todos ellos hubiera técnicos del Ayuntamiento e inmigrantes de diferentes asociaciones del Municipio. Se habían preparado previamente dos guiones para sendas conversaciones. La primera conversación versaría en torno al pasado de la inmigración en Getafe (tan lejano o cercano como quisiera entenderse). La segunda, sobre su presente y su futuro. A cada conversación se le dio 25 minutos de reflexión en pequeños grupos más 15 minutos de puesta en común a través de los portavoces de cada uno de los grupos.

Las conclusiones fueron espectaculares. Se comprobó lo positivo que es compartir conocimiento en un entorno propicio y cómo cada cual, desde su experiencia particular, puede aportar su granito de arena al conjunto de una comunidad que busca el bien común. Y, por nuestra parte, comprobamos cómo determinadas dinámicas de grupo favorecen notablemente la participación y la obtención de resultados, cuando éstos deben construirse sobre las aportaciones de muchas personas.

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